CUIDADO CON LAS DIETAS MÁGICAS
En los últimos veinte años el sobrepeso y la obesidad han repuntado en sus estadísticas a nivel mundial, siendo uno de los motivos de la instauración de enfermedades crónicas como las cardiovasculares, diabetes hasta algunos tipos de cáncer, motivo por el cual la población ha tratado de buscar ayuda en los especialistas.
Muchas de las personas que luchan para perder peso tienen mucha ansiedad, no sólo por los alimentos, si no también por lograr su objetivo lo cual las hace presas fáciles de aquellos que ofrecen resultados rápidos con dietas milagrosas. Estas dietas prometen la pérdida de varios kilos en poco tiempo y ofrecen una alimentación estructurada fuera de los principios médico-nutricionales saludables.
Dentro de estos pacientes que requieren perder peso se mimetizan aquellos que teniendo un peso saludable, tienen una distorsión en la apreciación de su físico, no tienen sobrepeso pero se sienten gordos, y no podemos dejar por fuera los casos de bulimia y anorexia. La obsesión por tener el llamado ¨peso ideal¨ ha servido de base para aquellos que han hecho del sobrepeso un negocio millonario. La frustración más grande por parte de quienes caen en estas dietas fraudulentas es el efecto rebote y en algunos casos perder la vida.
Si acude a algún sitio buscando perder peso y observa algunas de las siguientes características, tenga mucho cuidado porque es probable que ud. esté a punto de caer en manos poco profesionales:
Observe si el lugar donde será atendido luce con estructuras improvisadas.
Su cita no se respeta bien sea por desorganización o muchas personas en espera. Mucho público no significa eficacia en el tratamiento.
No le atiende el profesional por el cual ud. llegó al lugar, y es atendido por un ¨asistente¨ atribuyendo que está entrenado por la persona que promociona la dieta.
El costo de la consulta es muy baja pero le exigen que compre un kit de medicamentos para lograr la pérdida de peso.
Le entregan un formato de dieta impresa igual a todos los que han sido atendidos.
Le entregan una dieta sin hacerle una historia médica ni solicitarle exámenes de laboratorio.
La dieta se acompaña de medicamentos empacados en envases sin etiqueta que indiquen sus compuestos activos.
Quien le atiende le extiende récipes sin colocarles su sello personal donde se lea de forma clara el nombre, su especialidad y su número de registro en sanidad o gremio que autorice su ejercicio profesional.
Ha escuchado rumores sobre mala praxis del sitio donde está acudiendo o sobre el profesional en relación a no pertenecer al gremio que dice representar.
Si observa mucha publicidad tanto impresa como en medios de comunicación, esté atento ya que los profesionales serios en pérdida de peso viven de la publicidad oral que realizan sus pacientes con resultados verdaderos.
Quien bautiza la dieta que otorga con un nombre comercial, muchas veces es un fraude.
Si observa el uso de programas de televisión o radio con fines de promoción de una dieta en particular, tenga presente que el consumo de un grupo de alimentos restringiendo otros no es el fin de la educación de los medios de comunicación, sino promocionar hábitos alimentarios saludables.
Si ud. es atendido de forma grupal donde le dan una charla del por qué va funcionar la dieta milagrosa que está a punto de empezar y a todos los asistentes, sin ninguna personalización se les entrega el mismo formato de alimentación, es seguro que ud. no tendrá éxito con ese tipo de tratamiento.
Si le cobran el tratamiento de perdida de peso con un monto alto de dinero con la justificación que ésto le va a cubrir varias consultas, tenga desconfianza, ya que los estudios demuestran que el 40% de quien empieza una dieta no acude a los controles consecutivos, estadísticas conocidas por quienes usan este sistema.
No permita que jueguen con su salud ni con sus buenos deseos de emprender una alimentación sana. Busque la ayuda de un profesional certificado y con años de trayectoria en perdida de peso donde ud. sienta que es un paciente y no un cliente más. No se ilusione creyendo en pérdidas de peso rápidas, éstas sólo se logran cuando hay diuréticos que hacen perder rápidamente agua de nuestro organismo, o cuando hay pérdida de masa muscular sobre todo en la dietas de un solo grupo de alimentos (proteinas, vegetales, fruta o sólo infusiones y jugos), por tanto su salud está en riesgo. Parta de la premisa que así como nos tomó tiempo ganar peso, debemos darle a nuestro organismo un tiempo prudente para perderlo sin sacrificar energía, salud y bienestar, sobre todo busque un profesional que respete las recomendaciones de médicas que ud. posea en caso de tener otras enfermedades a parte del sobrepeso u obesidad. El profesional que le ayude a perder peso no sólo debe ser capaz de quitarle esos kilitos demás también debe descubrir si hay alguna razón que justifique la ganancia de peso, la corrija ya que el secreto de tener un peso saludable no es bajar de peso sino mantener el peso logrado.
.
0 comentarios: